¿En que consiste?
- Alteración motora
- Aumento del tono muscular
- Incapacidad de relajarse
- Interferencia con actividades cotidianas
- En España: más de 60.000 pacientes espásticos
- Su repercusión funcional incluye: Interferencia con manipulación, prensión y sujeción de objetos, dificultad capacidad de vestirse/desvestirse e higiene y alteración para mantenerse sentado, de pie y andar.
Tratamiento con Bótox
Entre el arsenal terapéutico para el abordaje de la espasticidad, la infiltración intramuscular de toxina botulínica ocupa un lugar destacado. La toxina botulínica resulta útil en el tratamiento de la espasticidad por la capacidad que tiene de debilitar específicamente los músculos infiltrados. Provoca una denervación química reversible al impedir que se liberen las vesículas de acetilcolina en las uniones neuromusculares de los músculos afectados. Su efecto tarda generalmente entre 1-5 días en aparecer, y dura de tres a seis meses.
